jueves, 28 de febrero de 2013

Fallece Richard Street de los Temptations

Richard Street nació en Detroit el  5 de octubre de 1942 y murió el 27 de febrero de 2013 en la Vegas (Nevada). Fue miembro de los Temptations  desde sus inicios procedente del grupo Distants y a mediados de los sesenta formó parte de los Monitors. Volvería a entrar en la banda a principios de los setenta. Se da la circunstancia de que Street fallece pocos días después que nos dejara otro miembro de los Temptations, Damon Harris, el 18 de febrero de 2013 (+ info).

Las raíces de los Temptations están en Birmingham, Alabama, donde nacieron Paul Williams el 2 de julio de 1939 y Eddie Kendricks el 7 de diciembre de 1939. Ambos crearían  The Primes (aka The Cavaliers) y después se trasladaron a  Detroit donde conocieron a los componentes de los Distants: Otis Williams (nacido en Texas el 30 de octubre de 1941), Melvin Franklin (nacido en Montgomery, Alabama, el 12 de octubre de 1942), el mencionado Richard Street y Elbridge "Al" Bryant (nacido en Thomasville, Georgia, el 28 de septiembre de 1939). Trabajan cantando coros para otros y empezaron grabando algunos temas para Northern Records.  

The Monitors
En 1960 se convertirían en los Elgins y después en The Temptations con Otis Williams, Paul Williams, Melvin Franklin, Eddie Kendricks, y Elbridge "Al" Bryant.  Su primer contrato discográfico lo firmaron con Miracle Records para quienes grabaron "Oh, mother of mine" (1961) y "Check yourself" (1962). Berry Gordy les contrató para su discográfica y,entre otros, sacan en 1962 un single con "Paradise" y “Slowdown heart”. Esta segunda era original de Smokey Robinson, quien se convertiría en productor y creativo de la banda. Después vendría otro single con los temas “Dream come true” y "Isn't She Pretty" (1962). 

Street formó parte de los Monitors, antes llamados The Majestics, desde mediados hasta finales de los sesenta con los que grabó varios temas como "Doctor Of Love" o “Greetings (This is Uncle Sam)" que interpretaron los  Valadiers, cuya letra, según cuentan, se escribió en el ejército y estaba dirigida a los jóvenes afroamericanos durante la guerra del Vietnam. El resto de componentes eran Sandra Fagin, Maurice Fagin y Warren Harris. Tras los Monitors, Richard se encargó del departamente de control de calidad de la Motown.

En los Temptations, Bryant sería substituido en 1963 por Dave Ruffin (nacido en Mississippi el 8 de enero de 1941) y llegó su primer éxito, “The way you do the things you do” en 1964. Sus directos causaban sensación no solo por sus magníficos temas y voces  sino también por las coreografías y esa extraordinaria elegancia en el vestir.  También grabaron  álbumes memorables como “With a lot o'soul” (1967). Un año después, se encargan de la producción del grupo Eddie Holland y Norman Whitfield, autores del  famoso “I wish it would rain”. David Ruffin dejó la banda para empezar una carrera en solitario y en esa época los Temptations colaboraron con las Supremes en dos álbumes “Together” (1968) y “Join the Temptations” (1969). Con el trabajo “Cloud nine”   (1969) investigan en el llamado soul psicodélico que perfeccionarían en “Psychedelic shack” (1970). Kendricks, tras grabar la balada “Just my imagination”, les deja para continuar su carrera en solitario y al poco tiempo también se va Paul Williams quien moriría dos años más tarde, el 17 de agosto de 1973.  

Temptations 1972
Entonces es cuando se incorporan Otis Harris, (nacido  el 17 de julio de 1950 y fallecido el 18 de febrero de 2013) que adoptaría el nombre de Damon porque ya había otro Otis,  y Richard Street que ya había estado con ellos a principio de los sesenta.  En 1972 sacaron el álbum “All directions” con su conocido “Papa was a rolling Stone” y al año siguiente, 1973, el álbum “Masterpiece”, con su largo tema homónimo de catorce minutos, “Plastic Man” y la sensacional “Ma”.

A mediados de los setenta, con el funk ganándole terreno al soul, Damon Harris es despedido de  la banda en 1975 por unas declaraciones inapropiadas sobre el grupo que perjudicaron la imagen de la banda, según explica en su libro Otis Williams, y decide reformar a los Young Vandals. El 26 de octubre de 1975 moría Elbridge "Al" Bryant.  En los Temptations ya sólo quedaba el mencionado Otis Williams de los originales y en 1976 firman con Atlantic. Volverían a Motown en 1980 publicando el disco “Reunion” con David Ruffin y Eddie Kendricks unidos para una gira.

Richard Street en el centro
En 1987 sacarían “Toghether again” con el que regresó Dennis Edwards. A finales de los ochenta y noventa se sucedieron las dispuestas entre los miembros.  David Ruffin murió el 1 de junio de 1991. Eddie Kendricks falleció el 5 de octubre de 1992. Melvin Franklin murió el 23 de febrero de 1995. Otros de los primeros miembros de los Temptations fallecidos son Ricky Owens el 6 de diciembre de 1996 a los 57 años.  En los últimos años se habían formado varios grupos de homenaje a los Temptations encabezados por Dennis Edwards, el difunto Damon Harris y Otis Williams quien sigue aún en activo con su banda.

Harris grabó varios temas en solitario como el álbum "Silk" de 1978 hasta que dejó la música y se trasladó a Reno a acabar sus estudios universitarios. Volvería a cantar en la década de los noventa en una formación nueva de los Temptations con Richard Street. Ambos colaborarían en algunos dúos. Richard también tuvo una carrera en solitario y estuvo casado de 1969 a 1983 con la cantante de las Velvelettes, Carolyn “Cal” Gill. 

Los Monitors cantando uno de sus temas "Doctor Of Love".


En este otro video podemos ver una actuación en un plató de televisión de los Temptations en 1972 cantando los temas "Smiling Faces (Sometimes Don't Tell The Truth) y "Superstar"

martes, 26 de febrero de 2013

Los Smoggers, "rompiendo" normas para desgastar tus botas “garage” con un nuevo Ep

Los Smoggers acaban de editar, de la mano de Kotj Records y Ghost Highway Recordings un nuevo Ep bajo el título genérico de “Breaking your Boots with…”. Recoge cuatro canciones perfectamente identificables dentro  del abanico “garage” de esta potente banda andaluza aunque suponen un paso más allá con respecto a su ya prolífico repertorio de temas propios.  Si bien hasta el momento, sus principales referencias musicales las podíamos ubicar en el “garage punk”, cargado de potente fuzz, más detalles de revival, en este Ep se decantan por esos peculiares sonidos de rock and roll y beat más primitivos. Con estos parámetros, a medio camino entre finales de los cincuenta y principios de los sesenta, han conseguido crear y sobre todo plasmar con éxito cuatro extraordinarias canciones mediante un sonido magnífico.


Los Smoggers se formaron en 2008 con Ana González a la batería, farfisa y voces; Gustavo Jiménez al bajo; Fernando Jiménez, voz, guitarra, armónica; y Jesús Blanco, voz y guitarra. Tras aparecer en algunos recopilatorios, debutan en febrero de 2011 con un mini Lp 10”, editado por Clifford Records, con el título de "Smoggin´Your Mind". Ese mismo año sacan un single con Grit records y a principios de 2012 presentan, también con Clifford, otro mini Lp con el título de “Chinese Food”. Estos tres trabajos consecutivos les sitúan en el candelero de los mejores grupos actuales de “garage”  a medio camino entre el “Back from The Grave” y la primera época de Crypt Records. 

En abril de 2012 graban en los Hollers Analogic Studios de Málaga los temas de su siguiente sencillo editado con KOTJ Records (+ info) con los temas “Shame on You”, más una versión del “It´s just not the Same” de los Delinquents, banda tejana de los ochenta y un tercer tema titulado “Jump inside”. En esas sesiones se grabaron también las canciones de este nuevo y flamante single que te presentamos.

Los temas fueron grabados y producidos por Maxi Hollers y Mike Mariconda, encargado a su vez de la masterización. El artwork del disco ha corrido a cargo de Christophe Lopez-Huici, ilustrador y dibujante francés afincado en nueva York, del que conocerás probablemente su trabajo de animación con plastilina o sus varios proyectos relacionados con el mundo de la música como, por ejemplo, las portadas de discos de los Barbacans o los Sixty Second Swingers.   La fantástica edición de este Ep, a cargo de estas dos indispensables discográficas de nuestra escena, está limitada a 400 copias: la mitad en vinilo negro y la otra, en vinilo púrpura, con el aliciente de que incluso cambian los colores de los elementos de la portada en la que adquieren un  protagonismo central unas desgastadas botas “garage” con tacón cubano y pantalón a rayas bailando junto a otras botas blancas “sixties” de caña alta con medias de rejilla.    

Abre el disco una conversación entre chico y chica que nos recordará aquellas míticas series de TV americanas de los sesenta, incluidos los dibujos animados de Hanna Barbera. La pareja están entusiasmados por empezar a bailar al son de los Smoggers. El primer tema se llama “Beat a Go-Go” y en él  tendrán un papel importante ambas voces. La masculina lleva el peso melódico del tema con la ayuda del contracanto femenino que añade detalles que consiguen  un toque divertido y original. El resultado es un sonido precisamente muy beat, pero con las raíces previas de un rock and roll años cincuenta. Nos queda la sensación de que bien podría tratarse de una banda yanqui de principios de los sesenta que acabara de oír, por vez primera, a los grupos de la “invasión británica”.

Los Smoggers nos deleitan con su gran facilidad instrumental para conseguir potentes riffs entre una rítmica perfecta. Como ejemplo, el siguiente corte de la cara A titulado “I need your loving” en el que sobresalen desarrollos impecables de guitarra, con solos de vicio, coros de deseo, y gritos primitivos.   

En la Cara B nos ofrecen un tema llamado “Little Girl”, absolutamente demoledor y en el que aparece otro detalle para confirmar nuestra teoría que sitúa el disco en ese “impasse” entre décadas. Nos referimos al recurso vocal que los Smoggers añaden para recordar el tema "Papa-Oom-Mow-Mow" de 1962 de la banda de  doo-wop, The Rivingtons que, como bien sabes, utilizaron los Trahsmen para su “Surfin’Bird” de 1963. Anécdotas aparte, esta canción original de los Smoggers  ejemplifica, de nuevo, la brillantez melódica, la fiereza temática y la destreza instrumental de este formidable cuarteto andaluz. Acaba el single con otro corte sin desperdicio alguno, titulado  “You don’t want my love”  en el que se luce nuevamente una guitarra penetrante, con otro potente solo, arropado por un ritmo trepidante marca de la casa.


Los Smoggers, amparados por sellos de prestigio, consiguen que sus discos sean mucho más que una edición discográfica divertida y contundente como es el caso. Su nuevo Ep no solo confirma, por enésima vez, a una de nuestras mejores bandas de “garage” sino que encima nos ofrecen cuatro temas de auténtico lujo que bien podrían atribuirse a un grupo inédito de principios de los sesenta, entre los  mejores de esa seminal época. Como bien dice Mike Kastelic de los Cynics en la hoja de promoción de este Ep, los Smoggers nunca te defraudarán. Esa seguridad no solo obedece al enorme trabajo musical realizado por este cuarteto en cada uno de sus discos, sino también es consecuente a la entrega de sus  aclamados directos así como a su amabilidad en el trato cara a cara, con honestidad manifiesta en cada uno de sus actos tanto a nivel personal como artístico.

Fallece Virgil Johnson de los Velvets

Virgil Lewis Johnson nació el 29 de diciembre de 1935 en Cameron, Milam County, Texas, y murió el 24 de febrero de 2013 en Lubbock (Texas). Formó parte de los Velvets, grupo de doo-wop, con unas extrordinarias voces que solían acompañarse de arreglos de cuerda.

La familia de Johnson se mudó a Lubbock donde estudió Virgil hasta llegar a la Texas Tech University. Estuvo enseñando inglés en el instituto de Odessa donde reclutó a cuatro de sus estudiantes para formar un quinteto de voces con Johnson como solista más Mark Prince (bajo), Clarence Rigsby (tenor), Robert Thursby (tenor), y William Solomon (barítono). En 1960, impresionaron a Roy Orbison quien los escuchó mientras  estaba de visita en Odessa. Les recomendó a Fred Foster, propietario de Monument Records en Nashville, Tennessee, quien había producido el tema de Orbison, "Only the Lonely".

Foster se inventó el nombre "The Velvets featuring Virgil Johnson" con el que grabaron "That Lucky Old Sun"/"Time And Again" y "Tonight (Could Be The Night)"/"Spring Fever". Las caras B son de Orbison pero Johnson es el autor de "Tonight". Les acompañaron Boots Randolph y Floyd Cramer.

Su siguiente single fue "Lana"/"Laugh", ambas escritas por Orbison y Joe Melson . “Lana” sería un éxito con la voz de Roy y fue versionada en español por los Loud Jets, con el título de “Hermosa Laura”. Hasta 1966, los Velvets grabaron más singles con Monument.  

Los Velvets gustaban más a los blancos que a los negros que no les incluían dentro de sus grupos preferidos de R&B hasta el punto que muchos dudaban incluso que fueran un grupo negro.   

Al final, Johnson volvió a la enseñanza desde finales de los sesenta en el colegio donde había estudiado, el Dunbar High School, inicialmente solo para niños negros, del que llegó a ser su director.  En Lubbock se dedicó también al mundo de la radio y trabajó como Dj de la emisora KSEL y después la KDAV.  Clarence Rigsby murió en un accidente automovilístico en 1978.


En este video podemos disfrutar de su maravilloso tema "Tonight (Could Be The Night)" (Monument 1961).



Los Velvets también interpetaron la canción "Lana" (Monument 1961) con la que triunfaría su autor Roy Orbison y que fue versionada en español por los Loud Jets, con el título de “Hermosa Laura”.

 

lunes, 25 de febrero de 2013

Muere el gran guitarrista de rock sureño, Dan Toler

Dan Toler nació en Indiana en 1948 y murió en Florida el 25 de febrero de 2013 tras luchar contra la esclerosis lateral amiotrófica que padecía. Apodado con el sobrenombre de "Dangerous Dan Toler", fue un extraordinario guitarrista estadounidense que formó parte a finales de los setenta y principios de los ochenta de los Allman Brothers Band.

Empezó a ser muy conocido en la década de los setenta cuando formó parte de la banda de blues y rock sureño Dickey Betts & Great Southern, banda creada por el miembro de los Allman Brothers Band, Dickey Betts .  Dan estuvo en la grabación de los discos de título homónimo “Dickey Betts & Great Southern” de 1977, segundo de Dickey, y el “Atlanta’s Burning Down” de 1978. La banda estaba formada entonces por Dickey Betts, guitarras y cantante principal; Dan Toler, guitarras y voces; Tom Broome, teclados y voces;  Ken Tibbets, bajo; Topper Price, armónica; más los bateristas  Jerry Thompson y Donnie Sharbono.

Luego pasó a ser miembro de The Allman Brothers Band desde el año 1979 a 1982. Este grupo de rock sureño había empezado la década en el mejor de sus momentos confirmando  su extraordinaria capacidad creativa y de improvisación en los directos. Pero justo en su mejor año, 1971, en que graban los famosos conciertos de “At Fillmore East”, su guitarrista y fundador Duane Allman padece en el mes de octubre un accidente mortal de moto en Macon (Georgia).  Un año después, noviembre de 1972, moría su bajista Berry Oakley también en accidente de moto y cerca de donde había muerto Duane.

Los Allman Brothers Band siguieron adelante pero en 1976 se separaron a raíz de las continuas discusiones entre sus dos principales factótums, Gregg Allman, órgano, piano, guitarra, voz; y Dickey Betts, guitarra y voz. Prometieron no volver a tocar juntos pero a  a finales de los setenta se reunieron con  Butch Trucks, batería;  Jai Johanny "Jaimoe" Johanson, batería; Dan Toler, guitarra y David Goldflies, bajo. En 1979 grabaro  “Enlightened Rogues”, al año siguiente “Reach for the Sky” y en 1981, “Brothers of the Road”. En los tres participó Dan Toler. A partir de 1980 se incorporaría a la batería, su hermano  David "Frankie" Toler en lugar de Jaimoe, y Mike Lawler, como teclista. En 1982 volverían a separarse.  No sacaron otro disco hasta 1990. En los nuevos Allman Brothers Band, Bets siguió hasta el dos mil, continuando después  Gregg Allman, Butch Trucks y Jai Johanny "Jaimoe" Johanson.


Durante los ochenta, los hermanos Toler, Dan y Frankie formaron parte de la banda de Gregg Allman con el que sacaron el exitoso álbum “I'm No Angel” (1987) y “Just Before The Bullets Fly” de1988. También fomaron parte de una versión reformada  de los Great Southern en la década de los dos mil. Durante los noventa Dan se interesó por el jazz fusion y colaboró con el músico Mark Pettey. Después formaron parte de la Townsend Toler Band con John Townshend y Dan se unió a los Renegades of Southern Rock con George McCorkle, el mencionado John Townsend, John McKnight, Jack Hall, y Taylor Caldwell. En 2009 volvería a colaborar con Townshend y grabaron juntos un álbum con sus nombres.   El último proyecto de Dan fue la Toler-Tucci Band con la que sacó un álbum "Doc's Hideaway" en agosto de 2012.

No fuimos nosotros, delicado pop acústico flotando entre promesas de amor

No Fuimos Nosotros son un dúo de pop acústico formado en Viveiro (Lugo) por Iván Vale (voces y percusiones) más Manuel Martínez “Peque” (guitarras , bajo, coros y percusiones). De la mano de Rufus Recordings presentaron en 2012 su primer trabajo en vinilo, un 7” con dos versiones: “El Flotador” de Airbag, en su cara A; y “Promesa de Amor” de Greg Townson de los Hi-Risers, en su Cara B.  En ambos temas, No Fuimos Nosotros, pusieron de su parte toda su capacidad instrumental  y sapiencia melómana para captar la esencia melódica y convertir estas dos preciosas canciones en algo propio que llegara a la fragilidad del alma con el intimismo de los arreglos. 

Manuel e Iván. Foto: Pequito Martínez

Ambos músicos formaron parte con Pelayo Fernández de Teléfono Rojo, banda de power pop, y colaboraron en un proyecto anterior llamado los Krápulas con quienes en 2005 graban en acústico unas versiones de los temas de esta banda de punk.  Montaron tres canciones para un concierto que formaría parte de un disco y un DVD que quería lanzar el  Ayuntamiento de Viveiro, y que fueron “Mañana de Carnaval”, “El novio del olvido” y “Echo de menos”. De este modo, en junio de ese año nacía No fuimos Nosotros.  Aparecieron los primeros conciertos, más versiones y el primer tema propio llamado “Vente” y en 2008 "Cena para dos".

El single que te recomendamos fue grabado en los Estudios Pink en agosto de 2007 y en enero de 2008. Se remezclaron en mayo de 2012 al mismo tiempo que se regrababan  las voces del tema “El Flotador” por Pelayo Fernández. En esa canción también toca el flautín, Paulo García.  Finalmente, Rufus Recordings editaba el  single, con una portada colorista, limitado a 300 copias de vinilo en color rojo. 

Foto: Pequito Martínez

En la cara A nos ofrecen una magnífica adaptación acústica del tema “El Flotador” de Airbag que estaba incluido en el Lp de 2000 titulado “Mondo Cretino”. Por cierto, seguro que te habrás dado cuenta que “No Fuimos Nosotros” es también el título de otro tema de los Airbag incluido en su álbum de 2003, “Ensamble Cohetes”. Pues bien, “El Flotador” de este dúo de Viveiro está  repleto de todo el encanto de una guitarra acústica que nos ofrece unos  magníficos toques veraniegos para acompañar a la voz principal quien consigue convertir el rabioso tema de los Airbag en un cariñoso pasaje musical, con un delicioso solo de flautín incluido. Un tema adaptado con el convencimiento del que quiere hacer algo a su manera como bien dice la letra.

En la cara B, nos regalan la versión de un emotivo tema de los Hi-Risers,  titulado originalmente como “Confessions Of Love”  e incluido en el álbum de Kaiser George & The Hi-Risers de 2006 “Transatlantic dynamite!”. En esta adaptación, No fuimos Nosotros aportan de nuevo el sonido de una espléndida guitarra acústica, tanto en el papel de solista como creando el genial acompañamiento.  Añaden recursos latinos para redimensionar un tema encantador de pop. Con su visión personal, consiguen amplificar, más aún si cabe, el aire cariñoso de esta canción entre algunos riffs de rock and roll. Todo ello interpretado desde el corazón y con una humildad encomiable.

Así son, o así al menos llegan hasta nuestros corazones, este peculiar dúo llamado No Fuimos Nosotros, con el entusiasmo que procuran un par de canciones bonitas, sencillas pero repletas de sentimientos, como debe ser. Con este de par de magníficas versiones, de textura elegante y plácida, nos avanzan los postulados de un microuniverso propio del que esperamos muchos otros momentos como estos, tan delicados como sinceros, y siempre dispuestos a emocionar como añaden en su particular promesa de amor.

Nota: Puedes escuchar los temas en el bandcamp y comprar una copia del single en Naranja y Negro.

viernes, 22 de febrero de 2013

Fallece Cleotha Staples de The Staple Singers

Cleotha Staples nació en Drew (Mississippi) en 1934 y murió el 21 de febrero de 2013 en Chicago (Illinois). Formó parte del conocido grupo de góspel, R&B y soul, The Staple Singers. Fue la primera hija de Roebuch “Pops” Staples y Oceola.  

“Pops” Staples, patriarca y fundador de los Staple Singers, nació en Winona, Mississippi, el 28 de diciembre de 1914. Trabajó en la plantación Dockery, recogiendo algodón después de la escuela, y allí coincidió con Charley Patton.  Ahorró unos cuantos dólares para comprarse su primera guitarra y empezó a tocar blues del delta.  Después interpretó espirituales para la iglesia y en 1931 formó parte del cuarteto de gospel, The Golden trumpets, en el que cantaba y tocaba la guitarra, instrumento que prefería al órgano . 

Pervis, Pops, Cleotha, Mavis
En 1935, acompañado por su mujer Oceola y sus hijos Cleotha y Pervis, se trasladan a vivir a Chicago. Allí se une a los Windy City’s Trumpet  Jubilees en 1936. La familia se amplía con dos hijas más, Yvonne y Mavis. Mientras Oceola trabajaba, Pops cuidaba de sus hijas e hijo y les enseñaba a cantar.  En 1948 se quitarían la “s” final del apellido para el nombre artístico y en la iglesia Mount Zion, del Reverendo Chester Staples, hermano de “Pops”,  deslumbran a la congregación sobre todo con la prodigiosa voz de Mavis con solo 9 años.

A partir de entonces,  The Staple Singers empezaron una carrera musical en la que aunaron, en un principio, el góspel, el blues y el country. En 1952 firman su primer contrato discográfico con el sello Royal y lanzan su primer single a 78 rpm con las canciones “These they are” y “Faith and grace“. Dos años después sacan otro sencillo con las canciones “It rained children” y “Won’t you sit down“. Después fichan con el sello Vee-Jay y en 1958, Yvonne, substituye  a su hermano Pervis que se incorpora al ejército. Dos años después volvería al grupo y lo dejaría finalmente en 1970, ocupando otra vez su sitio su hermana. Con Vee-Jay grabaron sus dos primeros álbumes, “Uncloudy day“ en 1959 y “Swing low sweet chariot“ en 1961.
Pops, Cleotha, Yvonne, Mavis

Al año siguiente, 1962, fichan con Riverside Records, para sacar cuatro álbumes estrictamente espirituales y fueron la primera banda de música negra que versionaron un tema de Dylan, “Blowin’ in the wind“, incluida en el disco ”This Land” del año 1963. Con el éxito obtenido, llaman la atención de Epic Records quien los ficha en 1965. Tres años después les capta Stax  donde mezclan funk,  soul y R&B, más letras de denuncia social. 

Cleotha, Mavis, Pops, Yvonne  
Sacan un par de Lp’s titulados “Soul Folk in action” y “We’ll get over“, acompañados de Booker T. & The MG’s y consiguen su primer número uno en 1972 con el tema  “I’ll take you there“. Ese año actúan en el mítico concierto Wattstax  en el Coliseo de Los Angeles.  Tras el descalabro de Stax, les contrata  Curtis Mayfield para su sello Curtom con el que sacan su segundo número 1 con el tema “Let’s do it again” en 1975.

 A mediado de los setenta participan en la película The Last Waltz (1976) versionando “The weight” de Levon Helm. Durante los ochenta siguen actuando aunque con menor repercusión. En los noventa reciben numerosos homenajes y el 19 de diciembre de 2000 fallece “Pops”.  Mavi Staples siguió con su carrera repleta de éxitos y continúa cantando en la actualidad.




jueves, 21 de febrero de 2013

Que tengas unas Buenas Noches porque “Un Mal día (lo tiene cualquiera)”

Las grandes obras de arte corren el riesgo de pasar desapercibidas en su época porque comportan cambios difíciles de asimilar por unas masas cuyo gusto ha sido moldeado por unos medios de comunicación, dirigidos por un poder establecido, que prefieren otros creadores coetáneos más asequibles. Esa lamentable realidad puede servirnos a modo de placebo para aminorar la decepción que provoca la indiferencia mediática que consiguen muchos trabajos memorables como éste que te presentamos: un genial álbum  titulado “Un Mal día (lo tiene cualquiera)” de la banda andaluza Las Buenas Noches. A nuestro modo de ver, el consumismo cultural sin criterio está tan extendido que incluso los medios especializados se ven implicados en un proceso lamentable de encumbrar trabajos discográficos prescindibles para obtener el máximo de beneficios factibles en el menor tiempo posible. El único propósito es que ese mercantilismo desaforado y a la desesperada, les permita seguir respirando con el agua sucia de la crisis subiendo cuello arriba.

No es nuestra intención pontificar sobre la nefasta situación económica que estamos atravesando. Muchos de vosotros y vosotras ya os habréis dado cuenta de que así son las cosas y pobre de aquel al que se le ocurra que podrían ser de otra forma porque puede que incluso vayan a peor. En realidad, la cultura en general, la buena y la mala, es lo menos rentable que existe en el mundo. Con lo bien que se venden los trapitos de moda cosidos a mano en el sótano de nuestras casas, para qué invertir en música.       

Por eso, cuando nos topamos con discos como el segundo trabajo de esta banda, es inevitable que nos alegremos al comprobar que el espíritu creativo de la escena folk de este país está muy vivo y sigue regalándonos grandes obras aunque, para ser precisos, es inevitable que a la vez nos enfademos al comprobar que en los dos últimos años no se ha escrito todo lo necesario para encumbrar, como es debido, este precioso álbum que te presentamos a continuación.   

Las Buenas Noches son un quinteto sevillano de folk con toques psicodélicos y pop, que en 2011 sacaron “Un mal día (lo tiene cualquiera)”, un álbum brillante editado por Aventuras Domésticas con Licencia Creative Commons. Contiene diez temas en formato Lp y una canción más en Cd. La banda debutó  en 2008 con un disco llamado “Aventuras domésticas” que editaron en CD y que se distribuyó por internet por medio de una licencia Creative Commons. En ese disco ya demostraron su firmeza folclórica con un toque propio especial que convertía a las canciones en algo muy suyo entre detalles latinos, blues,  copla, el klezmer originario de la comunidad judía de la Europa del Este o la chacarera, popular danza argentina. La banda está formada por Rubén Alonso (voz, ukelele, banjo, dobro) Miguel Brieva (cuatro venezolano, charango, percusión) Daniel Cuberta (batería) Camilo Bosso (contrabajo, xilófono) Dani Matas (guitarra española, charango, piano de juguete). Son un grupo de amigos que empezaron a juntarse allá por 2006 para compartir sus inquietudes musicales. Su concepto artístico nace de un espíritu creativo enfocado desde un punto de vista amateur. Siempre han tenido muy claro que quieren compartir su música sin la intervención de ningún intermediario. Varios de los miembros del grupo realizan actividades individuales como Cuberta en el campo audiovisual o Miguel Brieva en el cómic y la ilustración. 

Este segundo disco ha sido grabado en el Estudio La Mina de Raúl Pérez entre noviembre y diciembre de 2010.  La impactante y apocalíptica portada abierta, con sus espectaculares perspectivas y detalles surrealistas, así como los varios dibujos que contiene el disco más el diseño del álbum, son obra de Manuel Brieva, conocido dibujante que ha colaborado con varios medios como 'El Jueves', 'La Vanguardia', 'Ajoblanco', o el País. Entre su obra, destaca  'Memorias de la tierra' (Reservoir Books 2012), su segundo libro que recopila su trabajo disperso en diferentes publicaciones.  También cabe destacar que todas las canciones son originales de la banda así como  la participación en la grabación de dos de ellas, de la violinista Eloísa Cantón.

Manuel Brieva
El disco se abre con la canción “El fin del mundo”, en la que nos describen una situación catastrófica “con negros caminos calientes al sol, grietas en la tierra, torres que caen, riadas que se lo llevan todo”.  Un tema en el que ya destaca la impresionante voz principal, los sencillos arreglos con instrumentos de percusión, piano de juguete, y guitarras, que desembocan en un estribillo emotivo, otra de las habilidades de este grupo que construye atmósferas inquietantes que se abren de repente con momentos luminosos.   

“El hombre del tiempo”, es el siguiente tema y en él consiguen que el oficio de meteorólogo llegue a resultarnos escalofriante. Entre canciones asesinas de cielos claros y noches sin luna que esconden almacenes repletos de días perdidos, el Hombre del Tiempo “no me engaña”, tiene “un papel con mi nombre en su bolsillo” y “cena frío, cena solo, sin hambre, frente a un televisor sin sonido”. Junglaes el titulo de una canción hipnótica, con efectos selváticos, que arranca a caminar entre rumores y los “pasos de fuego”, del león. La canción va modificando su intensidad hasta conseguir su plenitud con un  pasaje encantador de guitarras. Le sigue “Tucumán”, en la que una estatuilla, recuerdo de esa provincia argentina, nos cuenta que “llevo mil años quieto sobre este pedestal, todo lo que es incierto lo he de figurar”. Otro ejemplo más del dominio de este grupo para moldear la rítmica con una habilidad encomiable. En “La Plaganos advierten quelas mentiras que contaste, volverán todas a ti”. Se trata de una excepcional canción minimalista, hasta bailable, con melodía turbadora en la que añaden toques folklóricos que la redimensionan con excelentes resultados melódicos con encantadores detalles pop.     

Foto: Sergi Moro
“El afilador”, con toques de blues ancestral a base de banjo, es el tema que solo se incluye en la versión en CD. En él nos explican “si tu perro te muerde el hueso del pié, señal de que no lo enterraste bien… Reír, llorar, tu navaja has de afilar (…) mujeres en vela cantan la canción, esconden cuchillos sin mala intención”. Aparece también un excepcional y cariñoso toque de violín casi “celta” para una segunda voz que engrandece la canción.

La Cara B empieza con percusión variada y contundente, más el acompañamiento  consistente de contrabajo, para definir una canción llamada “Crimea” en el que nos descubren un sendero bajo el agua que solo aparece al añochecer con la luna nueva; un camino hacia Crimea que marca el trazo de la canción y que finaliza con encomiables arpegios de guitarra. A continuación nos ofrecen “Media Vida”, canción triste, en la que expresan la pena y la incertidumbre ante la ausencia de una persona querida. Apenas contiene un párrafo pero tiene una intensidad conmovedora.

Los tres últimos temas del disco, tan mordaces como surrealistas, son quizá los más reivindicativos del disco. El primero se titula “40 ladrones” y en el nos cuentan la historia de unos ladrones que van al pueblo a robar lo que sobra mientras los señores duermen bajo llave sin notar el chasquido de la aurora. Impresiona la frase: “reluce como el oro, más es la usura…detrás del brillo solo hay amargura”. A destacar también su toque de piano de juguete. El siguiente canto es una turbadora “Oda a la seguridad” en la que se pone de manifiesto lo esperpéntico que puede resultar atajar la sensación de inseguridad de forma obsesiva mediante “muros de cuatros metros, alambrados de espinos, perros entrenados con instinto asesino, alarmas y detectores en todas las esquinas…”. Hasta el punto que sea el propio individuo el que sea encerrado bajo llave. Ideal para preguntarnos, como bien apuntan en el tema: ¿qué es mejor vivir, o sentirse seguro”. Sin desperdicio el final de la canción con la siguiente recomendación consecuente con esta sociedad obsesionada con la seguridad: “todo buen ciudadano debería, al menos una vez en la vida, ser atropellado por su propio coche”. Finaliza el disco con la hilarante  “El Día de tu boda”, una canción construida a base de rimas consonantes entre romanticismo, abismo, egoísmo, esnobismo. Un tema que se inicia de forma melancólica pero que adquiere un aire bailable y luminoso magnífico para acabar con el preceptivo “chim-pón”. 

Foto: Yúmar Hidalgo
Mientras escuchas las magníficas canciones, podrás deleitarte viendo las geniales ilustraciones y leyendo, en el insert del álbum, el excepcional trabajo poético, tan conciso como contundente, de las Buenas Noches. También incluyen el siguiente texto, a tener muy en cuenta: “Se recomienda encarecidamente, durante la escucha de este disco, la ingesta simultánea de substancias estimulantes o psicotrópicas en aras de obtener el mayor disfrute de su contenido musical”. Realmente tiene este disco una aura  lisérgica y surrealista que le sitúan al margen de gran parte de la escena folk Indie de este país obcecada en promocionar a frágiles cantautoras con planteamientos acústicos demasiado previsibles. El disco de las Buenas Noches va mucho más allá con canciones absorbentes, conmovedoras, hipnóticas, repletas de matices extraordinarios, a base de arreglos sencillos pero a su vez tremendamente emotivos. Dominan los crescendos y las intensidades como pocos, tienen un deje andaluz perceptible que les ubica y les honra pero que no les determina en su proceso creativo plagado de referencias a la tradición musical del Mediterráneo a Oriente pasando por África y Latinoamérica. 

Manuel Brieva

En el mejor de los futuribles, nos atrevemos a augurar que, dentro de unas décadas, se pagarán pequeñas fortunas por esta obra discográfica que probablemente ahora puede ser considerada ya de culto. Los integrantes de las Buenas Noches tienen una concepción del arte que les aleja de la ansiedad que puede provocar en el artista la necesidad imperante de profesionalizar su trabajo. La tranquilidad y la determinación que conforman su devoción artística, facilita sin duda que su proceso creativo sea tan espléndido y memorable. Francamente, se trata de un planteamiento optimista ideal para evitar, al menos por momentos, la absurda realidad cotidiana que nos acecha en ese mal día, quizá más de uno y de dos, que cualquiera puede tener.        

Nota: Puedes escuchar el disco en el bandcamp. Actúan el 8 de marzo de 2013 en Lleida dentro del festival de Músiques Disperses.

Muere el bluesman, Magic Slim

Morris Holt más conocido por el nombre de Magic Slim nació el 7 de agosto de 1937 cerca de la ciudad de Grenada en Mississippi, y murió el 20 de febrero de 2013. Empezó cantando en el coro y él mismo se construyó una guitarra de alambre que fijaba en una pared para tocarla. Después se interesó por el piano pero, a raíz de un accidente que padeció recolectando algodón, perdió el dedo meñique de su mano derecha y se decantó definitivamente por la guitarra. Con 11 años se trasladó con su familia a Grenada, donde conoció a Samuel Maghett aka Magic Sam, quien le enseñó algunos  trucos para tocar. En 1955, viajó hasta Chicago donde le esperaba Magic Sam. Allí empezó a tocar con Jimmy Johnson en el Seeley Club. Le pusieron el apodo de Magic Slim y pese a ser un gran instrumentista decidió volver a Mississippi por la gran competencia que había en la ciudad de Chicago.

El joven Magic Slim
Durante los años siguientes enseñó a sus dos jóvenes hermanos, Nick y Douglas "Lee Baby", a tocar el bajo y la batería respectivamente. Estuvieron tocando juntos aunque Slim tuvo que buscarse otro empleo, en concreto el de conductor de camiones. Volvería a Chicago en 1965 con sus dos hermanos y se unió a los Mr. Pitiful & the Teardrops, la banda del bajista Robert "Dancing" Perkins.

Slim intentó que fueran a Inglaterra a tocar pero Perkins tenía miedo a loa aviones y al final dejó la banda y fundó Mr. Pitiful & the Blues Busters. Magic Slim se quedó con el nombre de la banda The Teardrops y grabó un par de sencillos para Ja-Wes en 1966 con temas como "Scufflin’, "Love My baby", "She is Mine", y "Soul Blues (Little Hite)". 

Magic Slim en los ochenta

Durante los setenta la banda experimentó algunos cambios y grabaron en los estudios Ter-Mar de la casa Chess tres canciones: "Wonder Why" de Mel London, el instrumental "Teardrop" de  Morris Holt, ambas publicadas por Mean Mistreater, y "If you need me" de Coleman Pettis. Sin embargo Slim aún compaginaba la música con otros pequeños oficios como obrero de la construcción. Incluso la banda se vio envuelta en un tiroteo y Slim tuvo que estar en cama por herida de bala. 

Magic Slim más recientemente
En 1977 sacaría su primer álbum "Born under a bad sign" con el sello francés MCM y al año siguiente, otro trabajo llamado "Highway is my home" para otro sello francés, Black & Blue, con Fred Below a la batería, su hermano Nick al bajo y el guitarrista Coleman Pettis. En el año 1979 Bruce Iglauer de Alligator seleccionó cuatro temas suyos para el volumen II de la serie “Living Chicago Blues”. Por esa época Fred Below fue substituido por Joel Poston.  

Coleman Pettis falleció en 1983 y fue reemplazado por John Primer quien sería substituido más tarde por Jake Dawson y Michael Dotson. Otros de los baterías que pasaron por la banda fueron Allen Kirk, Earl Howell y Michael Scott. Finalmente, en los ochenta Magic Slim empieza a vivir de la música. A mediados de los noventa se trasladó a Lincoln (Nebraska). Siguió sacando gran cantidad de álbumes para Wolf Records en los noventa, Blind Pig en los 2000 y su último trabajo llevaría por nombre “Bad Boy” (2012).  


 

miércoles, 20 de febrero de 2013

Fallece Kevin Ayers, fundador de los Soft Machine

Kevin Ayers, nacido el 16 de agosto de 1944 en Herne Bay ( Kent, Inglatera) y murió el 18 de febrero de 2013 en su domicilio de Montolieu (al sur de Francia) mientras dormía. Fue un conocido cantautor inglés con una enorme influencia en el movimiento psicodélico,  miembro fundador de la banda Soft Machine a finales de los años sesenta.

Ayers pasó gran parte de su infancia en Malasia. Regreso a los 12 años a Inglaterra y durante  su paso por la universidad entró a formar parte de los Wilde Flowers con Robert Wyatt, batería y voz, Hugg Hopper al bajo, más los miembros de Caravan: Richard Sinclair, a la guitarra; David Sinclair, teclados; Richard Coughlan a la batería  y Brian Hopper, guitarra y saxo. 

En 1966 se convirtieron en los Soft Machine, una de las bandas más conocidas del llamado sonido Canterbury, mezcla de progresivo, psicodelia y jazz-rock.  El nombre lo sacaron de la obra de William Burroughs, The Soft Machine, de 1961. Fundó la banda el vocalista y batería Robert Wyatt, el guitarrista, bajista y vocalista Kevin Ayers, el guitarrista Daevid Allen y el teclista Mike Ratledge. Su primer single se titularía “Love Makes Sweet Music”. Daevid Allen, de nacionalidad australiana, tuvo que salir de Inglaterra y fundó los Gong, con lo que Soft Machine se quedó en trío. Grabaron su primer álbum en los Estados Unidos con titulo homónimo y a su regreso, Andy Summers de los futuros Police, se les unió para tocar en los conciertos pero después fue despedido por sus problemas con Kevin Ayers quien también decidiría acabar con la banda.


Obligaciones de contrato les hacen volver a tocar juntos en 1969 con Wyatt, Ratledge y el bajista Hugh Hopper quien murió en 2009. Con esta formación sacan “Volume Two”. El trío pasó a ser septeto con cuatro trombonistas y un saxofonista, Elton Dean quien murió en 2006. Así sacaron un par de álbumes: “Third” y “Fourth”.  Más tarde Robert Wyatt dejaría la banda y formó Matching Mole. Fue substituido por Phil Howard, un baterista australiano, con el que grabaron su siguiente álbum “Fifth”. También dejaría la banda y fue reemplazado por John Marshall. Karl Jenkins substituiría a Elton Dean. Con estos músicos grabaron en 1973, “Six”. Hugh Hopper se va y entra Roy Babbington. La formación de Babbington, Jenkins, Marshall y Ratledge grabaría los tres últimos trabajos oficiales de la banda: “Seven”, “Bundles” y “Softs”. Después se incorporaría el guitarrista Allan Holdsworth.  Al final los dejaría como también se marchó el único miembro original Mike Ratledge. La banda se separó en 1984 tras numerosos cambios y reincorporaciones.

ACNE (Ayers, Cale, Nico y Eno)
Cansado tras esa gira con Jimi Hendrix por los Estados Unidos, Kevin Ayers vendió su bajo a Noel Redding y se retiró a Ibiza con Daevid Allen. Allí empezó a fraguarse su primer álbum en solitario  “Joy of a toy” que aparece en septiembre de 1969. Fue su ópera prima en solitario a modo de declaración de principios. El segundo álbum se titula “Shooting at the Moon” (1970).

“Whatevershebringswesing” (1971), que podría traducirse como “Cantamos cualquier cosa que ella traiga” fue su tercera larga duración y es una muestra más del gran eclecticismo de su música. Les seguiría otro gran trabajo titulado “Bananamour” de 1973. Desde mediados de los setenta hasta la década de los dos mil ha grabado muchos más discos siendo el último “The Unfairground” (2007).  En los ochenta residió en Mallorca, con una producción irregular. Había visitado la isla en 1966, y a finales de los sesenta se instaló en Ibiza donde compondría gran parte de su primer álbum en solitario.

Durante su carrera trabajó con otros grandes músicos como Brian Eno, Syd Barrett, John Cale, entre muchos otros. A modo de ejemplo podemos recordar el álbum "June 1, 1974", un disco en directo grabado en el Rainbow Theater de Londres en la fecha que indica el mismo título. Conocido como el álbum ACNE (Ayers, Cale, Nico y Eno) fue un proyecto de Island Records ya que los cuatro músicos formaban parte de la discográfica.

Kevin Ayers interpreta aquí su tema "Shouting in a Bucket Blues" incluido en su disco de 1973 "Bananamour"


El hombre es un mendigo cuando piensa, y un Dios cuando escucha los “Hi-Flying Dreams” de Bang 74

Entre los mejores álbumes de cualquier discografía personal que se precie, suelen haber discos que, ya en una primera audición, nos alegra profundamente que se hayan cumplido todas las expectativas puestas en él. Con otros trabajos, puede que en un principio nos sintamos un poco desilusionados pero, tras posteriores escuchas, acaban por despertarnos un interés ciertamente inusitado y al final ganan un montón de merecidos enteros. Con el tiempo y la perseverancia del buen melómano, es posible que consigamos un tercer grupo de discos en los que se suman, en cierta forma, las anteriores categorías. Álbumes que no solo nos agradan desde un principio sino que, con el tiempo, aún nos sorprenden más y acaban por alcanzar la categoría de memorables gracias a una genialidad latente que va más allá de su, poca o mucha, aceptación actual. Bang 74 acaban de sacar con Rufus Recordings uno de esos discos magistrales, casi irrepetibles, en el que han incluido once apasionantes canciones que aúnan inconmensurables detalles de  rock and roll y pop combinados con su excelente capacidad melódica y rítmica.  Parafraseando al poeta romántico alemán Friedrich Hölderling: el hombre es un mendigo cuando piensa y un Dios cuando escucha los “Hi-Flying Dreams” de Bang 74.   

Bang 74 se crea en el Ferrol  a mediados de 2004 tras otros proyectos musicales como Flanelon Crash, Blind River o El Fantasma del Paraíso, con Rogelio Arias (guitarra y voz), Cristóbal Veiga (voz, armónica y guitarra) más los hermanos Óscar (batería) y Fran (bajo) Millarengo. Tras algunos conciertos en Galicia, incluido su paso por el prestigioso Felipop, editan su primer Ep en 2006 con el título de “Bang 74” con la Fonográfica General.  Se incluyen temas tan potentes como su “Keep On Trying”. Tras la presentación del disco, Rogelio deja la banda y empieza su carrera en solitario con el nombre de Roger de Flor.  En formato de trío sacan en 2009 su siguiente trabajo con su propia discográfica. Se trata de otro Ep titulado “Three Kids”. El título hace referencia a su nueva formación y es también un guiño al disco de ZZ Top , “Tres hombres” (Warner 1973). Contiene cinco temas memorables de powerpop como, por ejemplo, “Searchin for Romance”, o “Time to Make Things Rights”.  Con la admiración del tristemente ya difunto Michael Davis (n.1947- d. 2012), bajista de los MC5, empiezan a ser conocidos a nivel internacional y la gira de presentación del EP les lleva a Liverpool, al The Cavern Club dentro del cartel del festival IPO (International Pop Overthrow). En 2012, Rufus recordings les editaba un single con un par de versiones: En  la cara A, una adaptación de la canción “Can You fix me up With Her” de The Now; y en la cara B el  “You don’t love me yet” de Roky  Erickson. Puedes obtener mas información de ese disco entrando en la reseña de Magic Pop aquí.


“Hi-Flying Dreams” es, por tanto, su primer Lp. Un disco, con canciones originales de Cris Veiga, donde vuelcan sus inquietudes existenciales más esos sueños que luchan contra la realidad del contexto que les ha tocado vivir: una ciudad como es el Ferrol en la que la crisis ha hecho especial mella desde hace muchos años.  El álbum fue grabado en el estudio Bajocero, producido por el mismo grupo, y masterizado por J.M. Rosillo. Álvaro Lamas colabora tocando la steel guitar. La foto es de Cudipeich y el diseño de Aitor Ochoa de los Soul Gestapo. Tanto la portada como la contraportada consiguen transmitir una sensación de movimiento y potencia con esa atracción de feria, más esas grandes máquinas a sus pies, pasando por el uso intenso y saturado del color.     


Cris Veiga
El disco arranca con una sensacional canción llamada "Could of rock and roll" donde manifiestan una plenitud melódica casi absoluta. Guitarras, batería y voz principal se lucen entre excelentes cambios rítmicos y  pequeños solos encantadores. El tema se endurece al final con una contundente intervención eléctrica, preludio del siguiente corte titulado “Bells of revolution”. Se trata de otro tema altamente satisfactorio que va creciendo en intensidad mediante una serie muy lograda de poderosos riffs de guitarra de rock and roll, con un solo incluido, y un excelente estribillo de punk 77. Le sigue otro intenso corte llamado “Don’t expect too much”, espectacular tema de corte americano, con un excelente bajo y una guitarra de grandes vuelos aupando voces que se explayan en largas carreteras guiadas por una sensual steel guitar. Una base de acústica más batería  recorren los últimos compases de esta canción hasta llegar a su fin.   

“Ghost Twon” es todo un hit de powerpop con melodía sublime. Un tema en el que ponen de manifiesto las grandes bazas de este trío absolutamente capaz de construir canciones perdurables sin echar mano de recursos fáciles a medidas que van  introduciendo varias líneas argumentales que confluyen en trenzas de música pasional. Le sigue “Heaven’s Shore”, un miedo tiempo ensoñador que discurre con calma “celestial”, con una naturalidad exquisita, entre guitarras con distorsión y punteos cálidos que custodian la dulce voz principal. A destacar los efectos incluidos y un solo con aires psicodélicos que cierra el círculo de forma sublime.     

“Hi-Flying Dream” abre la Cara B del álbum. Es una canción que, por si sola, valdría como definición de diccionario para el estilo “high energy”. A medio camino entre el powerpop y el Glam rock, sobresale por ese ritmo bailable que marca el destino de una melodía sobrecogedora. A continuación nos ofrecen “Till the rooster sings” otro ejemplo más del estado de gracia en el que se encuentran estos ferrolanos cuya creación no tiene nada que envidiar a los mejores grupos de powerpop de todo los tiempos por la complejidad de unos arreglos que, en sus manos, parecen tan extraordinariamente sencillos.

Óscar Villarengo
“A Cricket’s Family” es una canción tierna, con sus guitarras y ritmos cariñosos  discurriendo suaves y calmados como un pequeño arroyo de sentimientos entre arpegios oníricos. Un tema que nos arropa como una familia y que precede a la tremenda “Curse”, con sus guitarras iniciales difícilmente mejorables. Contundencia y energía vital zarandeando la mediocridad que nos envuelve para construir unos instantes magníficos de pop a los que añaden convincentes  momentos de punk y fuzz hipnótico.        

“Hangover Pills” tiene unas guitarras casi funk mezcladas entre detalles que podrían desarrollar un buen tema de hard rock pero que nos sorprenden con una melodía de pop con estribillo sensacional. Cierra el disco un precioso tema llamado “Monday Song”, con un aire melancólico para nada empalagoso, a modo de perfecta balada existencial, entre detalles de steel y un golpe de distorsión final que despierta conciencias.  

Fran Millarengo
Resulta sorprendente darse cuenta de que este genial trabajo llamado “Hi-Flying Dreams” es el álbum de debut de una banda con aproximadamente una década de trayectoria artística. Como poco da que pensar en qué han perdido el tiempo algunas discográficas de este país amparadas en una supuesta “independencia” como mera fórmula de marketing. Nos referimos a esos sellos obcecados en la imagen más que en la música de los grupos, que van a la búsqueda desesperada de benéficos económicos, sin importarles apenas los criterios culturares. Por fortuna, una nueva actitud discográfica, para nada pretenciosa, mucho más creativa y entusiasta, como la que lleva a cabo Rufus Recordings, con la mano en el corazón más que en el bolsillo, permite que vean la luz discos tan memorables como éste que te recomendamos efusivamente. Ha llegado el momento de disfrutar, con todo lujo de detalles, de la música de estos pletóricos Bang 74, con el convencimiento de que, dentro de muchos años, las canciones de este y sus sucesivos álbumes seguirán sonando igual de originales y fascinantes como el primer día.  

Nota: Puedes escuchar el disco en el bandcamp y adquirir una copia en vinilo más digipack de regalo en Naranja y Negro.